Fic: Come on Eileen (tercer parte y final)
Jan. 7th, 2010 02:59 pm![[personal profile]](https://www.dreamwidth.org/img/silk/identity/user.png)
Título: Come on Eileen
Fandom: Harry Potter
Pairing: H/D
Rating: NC-17
Advertencias: Slash, sexo explícito, travestismo, modificación corporal, ligero D/s, un poco de celos… y eso, creo *duda*.
Genero: Porno/Romance con tintes de humor
Palabras: 8350~ (mi one shot más largo hasta la fecha *proud*)
Resumen: Harry hace una apuesta con Draco y grandes cosas resultan de esto. Un poco de perversión en sus vidas está bien.
Beteado: hasta la mitad por a-lunatica
NdA: Inspirada en la canción “Come on Eileen” (de ahí lo del vestido rojo) del grupo “The Clash”, y para ser un regalo de Navidad/Día de Reyes… claro que nadie pidió algo como esto, así que es un regalo para quien lo quiera, miren que es muy retorcido y seré feliz con que le guste a alguien para quererlo.
~.~
—¿Draco? —llamó Harry al salir de las llamas y no ver al rubio en la sala de estar. Sacándose la túnica rápidamente, caminó hasta su dormitorio, encontrándolo frente al espejo, mirándose apreciativamente, dejando que sus manos vagaran desde su cuello hasta sus pechos, apretándolos cuidadosamente por sobre el vestido, inhalando aire fuertemente al rozar los pezones duros bajo la tela.
Avanzando silenciosamente, se colocó tras el rubio, lo suficientemente cerca como para compartir el calor de sus cuerpos, sin llegar a tocarse, mirando el rostro sonrojado de Draco y sus ojos nublados reflejados en el espejo.
—No te imaginas el espectáculo que me estabas dando desde la puerta —susurró, respirando por sobre su oreja, apretando el lóbulo entre sus labios, lamiéndolo hambrientamente.
—Harry —jadeó Draco, inclinándose, cerrando sus ojos y recostándose contra el pecho del moreno, su voz nuevamente ronca, haciéndole saber al moreno que había retirado el hechizo para afinar su voz.
—Shh —lo silenció, bajando con sus labios, retirando los largos mechones rubios, besando ligeramente su cuello hasta apresar entre sus dientes el punto donde el pulso de Draco latía apresurado—. Continúa con lo que estabas haciendo antes de que te interrumpiera —dijo Harry, el tono de su voz ordenándoselo más que sugiriéndoselo.
Entrecerrando los ojos, Draco subió nuevamente sus manos, deslizándolas por sobre sus labios irritados bajo el labial que Harry se había encargado de correr con el beso necesitado en el ascensor. Iba a retirarlo con sus yemas, cuando Harry lo detuvo, sujetándolo por la muñeca, negando con la cabeza. Sintió como si los dedos del moreno quemaran sobre su piel, sólo pudo contener la respiración, notando su corazón acelerarse, hasta que lo soltó dejando sus manos sobre su cuello. Suspirando, siguió con su camino, rozando el borde de la delgada cadena que adornaba su cuello, el metal cálido gracias a la temperatura de su piel, haciéndolo inhalar con fuerza al tocar la marca roja que había dejado Harry al morderlo recién.
—Sigue —murmuró Harry, sujetándolo por la cintura, haciendo que su polla quedara perfectamente acunada contra las nalgas del rubio, apretándolo contra su pecho. A pesar de las capas de ropas entre los dos, Draco podía sentir el calor del otro abrasar su piel e inundar su vientre de deseo.
Deslizando los dedos bajo los delgados tirantes, los retiró hasta dejarlos colgando de sus hombros, permitiéndole acariciar sus notorias clavículas, rasguñándolas lentamente con sus uñas pintadas dejando marcas rosadas a su paso.
Oyendo el débil gruñido de Harry tras él y el involuntario empuje de sus caderas, supo que Harry estaba disfrutando más de lo imaginado con todo esto, aumentando la confianza que sentía en esos momentos, una ola de seguridad cubriéndolo mientras notaba los dedos del otro acariciar los huesos de sus caderas por sobre el vestido.
Bajando lentamente, pudo sentir la tensión en el cuerpo del moreno mientras avanzaba hasta sus pequeños pechos, rozando tentativamente los pezones duros, siguiendo el contorno hasta descender y tomar cada seno entre sus palmas, notando el peso y la curva de cada uno. Un gemido se atoró en su garganta al sentir las manos de Harry subiendo por su estómago hasta colocarse sobre las suyas, apretando hasta que sintió su erección, oculta bajo la ropa hechizada, dar un doloroso tirón.
—Harry —gimoteó, cerrando los ojos y empujándose contra la polla del moreno, disfrutando la presión sobre sus nalgas, y arqueándose contra las manos sobre su pecho, buscando más contacto.
Sin decir nada, Harry separó sus manos, arrastrándolas por sobre el traje, haciendo que sendos escalofríos recorrieran a Draco, hasta llegar al cierre en la espalda, deslizándolo tortuosamente lento, dejando que sus dedos rozaran la pálida piel bajo él, notando que no estaba usando sujetador, tal y como lo sospechaba.
—Voltéate —susurró, liberando el cuerpo de Draco de entre sus brazos, sintiendo su corazón arder al ver el rostro sonrojado y lujurioso del rubio—. De rodillas —ordenó, sin dejar de clavar su mirada en los ojos grises empañados de deseo.
Cayendo silenciosamente a los pies de Harry, pudo ver que el vestido terminaba de bajarse, arremolinándose a su alrededor, dejando todo su pecho descubierto a la mirada ávida del moreno y toda la tela rodeándolo como un halo. Inclinándose sumisamente, comenzó a desabotonar los pantalones, agradecido de que Harry se hubiera sacado en algún momento la túnica.
—Ve lento —murmuró Harry, enredando su mano en los largos mechones rubios, retirando con cuidado el fino broche que había adornado su pelo, dejando que cayera desordenado por su espalda, admirando la figura del rubio en un mar de rojo pecado.
Cuando por fin liberó la erección de Harry de los pantalones, un gemido aliviado dejó su garganta al saber lo cerca que estaba de tener al moreno en su boca. Ladeándose, avanzó hasta enterrar su nariz en los apretados rizos oscuros que cubrían la erección de Harry, disfrutando de ese aroma único en su novio. Acercándose hasta poder sujetar sus manos en los muslos de Harry, lamió tentativamente la base, sonriendo al sentir los músculos temblar bajo sus dedos. Separándose, besó toda la parte inferior, siguiendo la gruesa vena que palpitaba bajo su lengua, subiendo lentamente hasta llegar al glande levemente expuesto bajo el prepucio. Soplando unos segundos, pudo oír el débil sollozo de Harry llenando la habitación, casi ordenándole que no jugara con él; obedeciendo sin pensarlo, tomó la punta entre sus labios, presionando su lengua contra la delgada hendidura, succionando con fuerza en busca de más de ese líquido algo amargo, gimiendo en el fondo de su garganta.
—¡Draco! —prácticamente rugió Harry sobre él al sentir la vibración sobre su erección, enterrando dolorosamente los dedos en su nuca, jalando algo de pelo sin querer. Respirando agitado, apoyó una mano sobre el espejo y dejó la otra enredada en los mechones rubios, intentando tener algo de control sobre Draco.
Tomando un poco más en su boca, empujó con sus labios el prepucio, rodeando con su lengua el glande, cerrando los ojos de placer al sentir los temblores del cuerpo de Harry bajo sus dedos.
—Dioses, Draco —jadeó Harry, observándolo atentamente, deslizando sus manos a través de los mechones desordenados de pelo, hasta apoyar la palma contra su mejilla, empujando sus caderas suavemente en un signo para que Draco lo tomara por completo.
Respirando profundamente, se inclinó, deslizando sus labios por sobre la erección hasta sentirla topar en el fondo de su garganta, intentando pasar por alto su reflejo de arcada, sabiendo que los espasmos de sus músculos harían que Harry se volviera loco, sujetando la base del moreno con una de sus manos.
—Tus labios —jadeó Harry agitado, moviendo sus dedos hasta tocarlos, tensos e hinchados sobre su polla, corriendo algo del lápiz labial que aún permanecía en ellos—. Son como un pecado —gimoteó, deslizando su pulgar sobre su labio inferior, rozando su propia erección con el movimiento, haciéndolo cerrar los ojos con fuerza—. Merlín —suspiró—, si te vieras, con tu maquillaje corrido y tus labios rojos y ansiosos, tratando de tomar todo lo posible de mí —susurró, hipnotizando a Draco con sus palabras, sus ojos verdes desenfocados de placer.
Gimiendo, Draco se inclinó hasta lograr tomar toda la erección de Harry en su boca, sintiéndola pasar su garganta, impidiéndole respirar por unos segundos, hasta que se retiró, repitiendo el movimiento lentamente, acompasando su agitada respiración, tragando cada centímetro de la polla de Harry, sintiéndose marear por la falta de oxígeno y por la imagen que estaba seguro que le daba al otro con cada movimiento, bombeándolo despacio. Presionando su lengua contra el lado inferior del miembro del moreno, ronroneó, haciendo que todo su interior vibrara.
—Demonios —gimió Harry retorciéndose bajo la boca de Draco, sintiendo que si no lo frenaba se iba a correr… y eso no era lo que quería, no ahora—. Detente —jadeó Harry sujetándolo por el pelo, separándose con cuidado, retrocediendo hasta sentarse en la cama frente al espejo, intentando controlar su corazón y las ganas que lo quemaban por correrse sobre ese rostro que lo miraba con un gesto de superioridad desde el suelo, dejándolo cubierto de semen, para luego lamer cada gota y limpiarlo con cuidado, tentándolo hasta sentirlo derretirse bajo sus labios.
—Ven —siseó, respirando profundamente, observando el ligero balanceo de los pechos de Draco mientras dejaba atrás el vestido, quedando sólo con las pantaletas de encaje, que gracias al hechizo en ellas ocultaban lo que debería haber sido su pene, las largas medias de seda que llegaban hasta la parte superior de sus muslos, sujetas por un delicado portaligas y sus zapatos de taco que apresaban sus tobillos. Lo único que lo molestaba de toda la sensual imagen del rubio, era su erección oculta en encajes.
Haciéndole un gesto, palmeando la cama a su lado, sonrió al ver los pasos felinos de Draco mientras avanzaba, subiéndose con cuidado y sentándose tímidamente junto a él, como si minutos antes no hubiera tenido su polla hasta lo profundo de su garganta.
—Ponte sobre tus rodillas y manos —susurró, dejando que sus dedos tocaran ligeramente al rubio, rozando su vientre y sintiendo la piel ponerse de gallina bajo sus yemas. Obedeciendo, Draco se separó hasta quedar mirando silenciosamente a la cabecera, breves temblores de expectación recorriendo su espalda. Con cuidado se acercó, sintiendo su peso mover el colchón, hasta posar una de sus manos sobre la cadera del rubio, apresando con fuerza la piel bajo ella.
—Merlín —siseó Draco, notando cómo sus codos temblaban de los esfuerzos que quedarse quieto y dejar a Harry a cargo suponían. Suprimiendo un gemido, pudo sentir cuando Harry apareció una navaja, la magia revoloteando a su alrededor, como una caricia sobre su piel necesitada.
—No te muevas —ordenó serio Harry, dejando que el filo de la navaja rozara el muslo pálido. Sin dejar de observar la tensión en el cuerpo del rubio, la deslizó hasta las pantaletas de encaje, que con su hechizo hacían que la erección de Draco no se viera en lo absoluto, y con un movimiento preciso la cortó, moviéndose rápidamente al otro lado y haciendo lo mismo, dejando la ropa hecha jirones sobre las caderas del rubio.
—Joder —jadeó Draco, dejando su cabeza caer y ocultándola entre sus brazos, un furioso sonrojo cubriendo su rostro y una ligera capa de sudor comenzaba a perlar su frente mientras los dedos de Harry comenzaban a tocarlo, recorriendo su piel casi con curiosidad al tiempo que retiraban los trozos de encaje.
—Me encanta verte con estas medias —susurró Harry, colocándose tras Draco apretando las suaves nalgas con sus palmas, inclinándose hasta depositar un suave beso sobre cada una, subiendo hasta lamer el triangulo entre su cola y donde comenzaba su espalda, mordiendo con fuerza, sonriendo al sentir el tirón hacia adelante de la pelvis de Draco, huyendo de su boca, antes de volver rápidamente a su lugar, empinándose contra él y dejar todo su trasero a su disposición—. Buen chico —se burló, sujetando sus caderas, acercándose al oído del rubio, presionando todo su cuerpo contra él, dejándolo sentir su erección frotándose contra su entrada, buscando enloquecerlo con cada toque suyo—. Así, bajo mí, deseando todo lo que pueda darte, ¿no? —dijo, su voz tan profunda como un gruñido.
—Harry —gimoteó Draco al sentir el puño de Harry cerrarse sobre su erección y su mano libre sujetar uno de sus pechos, apretando entre sus dedos el pezón casi al punto del dolor. Sin poder evitarlo, se arqueó contra el moreno, anhelando más, empujándose contra la polla en sus nalgas, queriendo todo lo que pudiera obtener.
—Tan deseoso —murmuró, mordiendo su nuca hasta saber que dejaría una marca, oyendo el quejido bajo de Draco, apresurándose a lamerla ansiosamente, como si deseara borrarla con su lengua y llevarse el dolor en el rubio.
Alejándose unos segundos, tomó su varita, desapareciendo todas sus prendas, ahogando un gemido al sentir el contacto cálido de la piel del rubio contra la suya, volviendo a su lugar entre las piernas de Draco, bajando hasta besar tras sus rodillas, lamiendo y mordiendo lentamente hacia arriba, adorando cada centímetro de sus muslos y tirando con sus dientes de las medias de seda, disfrutando de los pequeños gemidos que Draco dejaba escapar. Cuando por fin llegó hasta arriba, suspiró, sintiéndose poderoso al saber que Draco esperaba ansioso cualquier cosa que hiciera. Que le hiciera.
Bajando y tomándolo con sus manos, separó y sopló entre sus nalgas, observando la piel rosada y arrugada abrirse y cerrarse contra el delicado estímulo, llamándolo a abusar de ella, sintiendo algo rudo y primitivo rugir en su interior de las ganas de poseer al rubio, de olvidar el preámbulo y tomarlo salvajemente hasta que ninguno de los dos pudiera mover ni un solo músculo, antes de controlarse e inclinarse y presionar su lengua contra la entrada apretada, sintiéndola latir bajo su toque, el músculo cediendo contra su invasión.
Un gruñido estrangulado abandonó a Draco mientras intentaba ocultarlo contra su antebrazo, mordiéndose con fuerza, sintiendo sus piernas temblar bajo los labios de Harry, que comenzaban a besar expertamente su entrada, dilatándolo velozmente.
—Dios —gimió, notando el empuje de la lengua afilada de Harry, penetrándolo un par de centímetros antes de retirarse, repitiendo el movimiento rápidamente—. Oh, joder —jadeó, creyendo que su vientre iba a explotar, al igual que sus bolas si Harry no lo dejaba de torturar de esa manera.
Apretando sus dientes contra la entrada del rubio, sorbió y mordisqueó la piel roja bajo su asalto, sintiendo su rostro húmedo con saliva y su erección rogando por algo de atención, pero tener al rubio estremeciéndose bajo él, era demasiado. Era adictivo. Enterrando su lengua por última vez, tan profundo como fue capaz, succionó, notando el dolor en su mandíbula con la posición, pero extasiado en los quejidos que Draco dejaba escapar contra la almohada.
—Por favor, por favor —rogó Draco, retorciéndose en el agarre del moreno, empujándose contra esa boca que lo estaba matando, su voz apenas un sollozo crispado.
Cuando Harry se separó de él, Draco se desplomó sobre la cama, temblando incontrolablemente, dejándose ser volteado por el moreno, mirándolo con ojos nublados de placer y sus labios rojos de tanto morderlos.
—Eres lo mejor —dijo ronco Harry, bajando hasta tomar la boca entreabierta de Draco con sus labios, besándolo con fuerza, gimiendo con la respuesta ansiosa del rubio, sus dedos largos enredándose en sus mechones, jalándolo y apretándolo contra él—. Quieto —susurró entre besos, sintiendo que se le escapaba el control de la situación, retirando las manos de Draco de su pelo y sujetándolas por encima de la cabeza rubia.
—Harry —gimoteó Draco, intentando soltarse sin muchas fuerzas. Así —desparramado sobre la cama, con él inmovilizándolo y esos pequeños pechos duros bajo su mirada, casi tan duros como la erección entre sus rizos rubios, y un sonrojo que cubría todo su rostro y cuello—, lo único que deseaba era poseerlo hasta que no existiera nada más.
Deslizando sus labios por sobre su cuello, bajo por sus clavículas, sintiendo cómo la respiración de Draco se aceleraba con cada centímetro que descendía, liberando un chillido estrangulado cuando una de sus manos bajó hasta tomar su erección y acariciarla lentamente, haciéndole recordar al rubio que aún faltaba bastante antes de que la noche terminara.
Deteniéndose sobre uno de sus pezones, lo lamió y mordisqueó hasta sentirlo aún más duro si era posible, tratando de tomar todo lo posible en su boca, antes de desviarse al otro para darle el mismo trato. Bajando y siguiendo el contorno, fue haciendo una hilera de mordiscos hasta llegar a su ombligo, presionando su lengua ahí, oyendo a Draco gemir mientras combinaba la paja que se mantenía haciéndole con los movimientos de su boca, descendiendo hasta tomar entre sus labios la cabeza de su erección, chupando ligeramente, deteniéndose al oír las incoherentes súplicas de Draco.
—No, por favor… no más… Harry. Por favor —sollozó, temblando bajo el moreno, su cuerpo serpenteando sobre la cama, intentando acercarse y alejarse de Harry al mismo tiempo.
—Shh, tranquilo —lo arrulló, subiendo por sobre él mientras tomaba sus piernas hasta dejar los tobillos encima de sus hombros, volteando su rostro hasta besarlos, lamiendo el borde donde el cuero se ataba sus pies, humedeciendo las medias y haciendo temblar a Draco. Continuando, subió más las piernas, inclinándose y subiendo el cuerpo de Draco, haciendo que su cola se apoyara por entre sus muslos y sintiendo los tacones de los zapatos clavarse en su espalda y su polla quedar frotando contra la entrada resbalosa del rubio, distrayéndolo unos instantes de la adoración a la que lo estaba sometiendo.
Concentrándose, besó sus rodillas, mordisqueando la piel y el músculo por el borde interno, sintiéndolo tensarse bajo su boca, enterrándole el taco en un espasmo, gimiendo al sentir la piel romperse, sabiendo que iba a quedar una costra por algunos días.
—Harry —gimoteó, sacudiendo la cabeza contra la almohada, empujando sus caderas contra su polla, deseando que terminara la tortura de una vez y por todas.
—Contrólate —siseó Harry, buscando algo por sobre la cama, sonriendo al encontrarlo. Tomando su varita tirada sobre el cobertor, susurró el penúltimo contra-hechizo que faltaba por hacer en el cuerpo frente a él, dejando el pecho de Draco tan plano como era siempre—. Me gustas con el traje, pero me gustas más aún así —susurró, inclinándose y doblando a Draco por la mitad hasta tomar con sus dientes un plano pezón, mordiendo hasta oír el quejido rasposo del rubio.
Separándose, apareció una botella de lubricante, apretándolo en su palma, llenándolo todo con el aceite, mojando el trasero y los muslos de Draco y su erección y su mano. Tirando la botella por cualquier lado, lo penetró con dos dedos, soltando un suspiro al sentir el interior del rubio, cálido y apretado contra sus falanges, pero aún distendido con la preparación anterior, viendo a Draco arquearse contra su mano, enterrándolos aún más profundos mientras soltaba un gruñido desde lo profundo de su garganta, exponiéndose lujuriosamente a su mirada hambrienta.
Retirándolos con cuidado, desoyendo el quejido del rubio, posicionó la cabeza de su erección contra la entrada de Draco, deseando embestir con fuerza, aunque apenas conteniéndose, empujándose firmemente hasta sentir sus testículos golpear contra sus nalgas, sintiendo cómo si todo el interior del rubio ardiera e intentara tragárselo, haciéndolo jadear con la fuerza de las sensaciones.
—Dioses, Draco —gimió, encorvándose sobre él, empujándose aún más dentro, oyendo el suspiro del rubio mientras estrechaba sus piernas en su cuello, apretándolo entre ellas. Retrocediendo, comenzó un rápido vaivén, empujándolo contra la cama y enterrándolo contra el colchón en cada acometida, notando los intentos de Draco de nivelarse y recibir cada embate a tiempo, clavándole los tacos con cada movimiento.
No podía durar, no con Draco gimiendo bajo él, su pelo rubio desparramado y su rostro contrayéndose de placer con cada embestida.
Sujetando la erección del rubio, lo empezó a bombear al mismo tiempo que se deslizaba con fuerza dentro y fuera de él.
—Oh, joder, Draco —jadeó, inclinándose hasta besarlo, haciendo que sus piernas se doblaran imposiblemente, tomándolo más profundo, golpeando su próstata en cada empujón a juzgar por los gritos de Draco.
—Harry —gimió el rubio, todo su cuerpo tensándose mientras se corría, mojando la mano del moreno que lo masturbaba y su estómago; su recto apretando a Harry con fuerza, sus músculos oprimiéndolo espasmódicamente, hasta hacerlo venirse dentro de él, un ruido gutural dejando sus labios, sintiéndolo empujarse un par de veces antes de detenerse por completo, su vista nublándose durante unos segundos, sintiendo que el corazón intentaba huir de su pecho.
Cayendo a un lado del rubio, dejó que las piernas de Draco se deslizaran de sus hombros, notando como su miembro, ahora flácido, se salía del interior que lo había apresado con tantas fuerzas. Sujetando su varita murmuró el hechizo para hacer desaparecer el resto de las cosas que aún vestía el rubio, espirando lentamente el aire al ver las medias y los tacos desvanecerse, apresurándose en tomar a Draco entre sus brazos, suspirando al sentirlo enredar sus piernas entre las suyas, apareciendo una manta sobre los dos.
—Te amo —susurró luego de unos minutos de silencio, apreciando la pausada respiración de Draco acomodado contra él, deslizando su mano por el pecho plano e irritado, cubierto de pequeñas mordidas que pronto se transformarían en morados sobre la piel pálida, acariciando y frotando los rojos pezones del rubio antes de abrazarlo nuevamente y evitar que pudiera alejarse—. Y quiero que todos sepan que es así, no sólo mis amigos. Acompáñame al baile de Año Nuevo —dijo, besando la coronilla de Draco, el pelo aún largo y húmedo desparramado por el resto de las sábanas, sintiendo los nervios revolotear en su estómago, respirando aliviado cuando el hombre entre sus brazos se movió hasta quedar a su altura y lo besó respondiendo con ansias a las caricias del moreno.
—Por supuesto que irás conmigo —dijo Draco, sonriendo antes de arrugar el ceño en una mueca adorable, según Harry—. ¿Y qué vas a decirles a tus amigos sobre Eileen? —preguntó, inclinando la cabeza y observando atentamente al moreno.
—¿Quién es ella? —preguntó, el nombre sin sonarle para nada.
—Es el nombre que inventé cuando tus amigos me preguntaron cómo me llamaba —respondió Draco, sus mejillas tiñéndose rápidamente.
—Ahh —respondió Harry, tratando de suprimir una carcajada al ver el rostro atormentado de Draco mientras intentaba ocultarlo escondiendo el rostro en su cuello, mordiendo con fuerza al oír una risilla escapar de sus labios—. Ouch —se quejó, sonriendo ampliamente—. Bueno, tú dijiste que Ron ya lo sospechaba… y debe haberle dicho a Hermione si es que ella aún no se da cuenta o lo acepta. Qué me importa si piensan que dejé a una mujer hermosa por ti, tú eres mejor.
—Soy la misma persona, Potter —siseó, rodando los ojos aunque sin dejar de sonreír, acomodándose nuevamente a su lado.
—Bueno, pero eso sólo lo sé yo… además, Eileen será nuestro pequeño y sucio secreto, no quiero que nadie más te vea así —gruñó posesivo, apretándolo ligeramente entre sus brazos—. ¿Qué te parece si llegamos al baile y te doy un beso que nadie olvidará jamás? —susurró repentinamente, subiéndose sobre Draco, montando sus caderas delgadas e inclinándose hasta dejar que sus labios se rozaran con cada palabra murmurada.
—¿Y qué tal si me das mi beso ahora? —respondió, jalándolo por el cuello, eliminando cualquier distancia y evitando que pudiera responderle.
Ya tendrían tiempo para planear cómo impresionar a todos cuando fuera el siguiente baile.
~,~Fin.
Comentarios??
no subject
Date: 2010-01-07 07:44 pm (UTC)no subject
Date: 2010-01-07 08:05 pm (UTC)De verdad, tenía miedo de publicarlo, porque no es algo que se trate como temática en el fandom en español, pero weno... alguien tiene que empezar. no?
Que bueno que te haya gustado ;) y sip... por algo me autodenomino Reina del Porn... :)
Besos!!
no subject
Date: 2010-01-07 09:11 pm (UTC)Es en momentos así que uno sabe que ha vendido su alma al demonio U.U
ERES MI IDOLA.
Aish, va a ser dificil sacar esto de mi mente.
Y encima después tengo Icpna con los gueys de mis amigos, de esta no salgo viva...
no subject
Date: 2010-01-07 09:22 pm (UTC)Y bueno... ya sabes... algún día seré ayudante del diablo para llevar gente al infierno xD probablemente me vaya bien xD
y no lo saques de tu mente =D que esto, al menos yo, lo encuentro muy hot para olvidarlo XD
Y disfruta con tus amigos, aunque no entendí porque ellos podrían decir algo :S
Besotes!!
no subject
Date: 2010-01-08 07:06 am (UTC)030
dios como me haces leer eso en horas de trabajo. :3333
creo ke definitivamente tu llevas la lista de los ke nos iremos al infierno.
No tienes por ke sentirte cohibida por el tema ke mencionas lo llevaste muy bien, (si le hubieras cambiado el pene ahi si me muero y me kedas mas XD) respetast muchisimo a draco y se ve que a el le gusto muchisimo estar asi XP asi ke mientras el no se queje nadie lo puede hacer XD
bueno me retiro (a seguir trabajando), y a hacer una transfusion, por ke despues de terminar de leer esto, creem ke la necesito urgentemente :3 >.<.
Re: 030
Date: 2010-01-08 05:56 am (UTC)Lo de "pene" no lo podía evitar, porque todos los otros sinónimos los había ocupado y rayos que se vería mal.repetir palabras.
Y obvio que iba a hacer que a Draco le gustara... digo el non-con es algo que no me va... no aún xD pero es cierto... igual me da algo de miedo publicar algo así, que es totalmente nuevo en el fandom en español, porque yo quisiera que todos leyeran y comentaran, pero que eso sucediera es difícil... de todos modos igual publico todo lo que se me cruce por la mente.
Y suerte con lo de tu transfusión xD
Besos!!
no subject
Date: 2010-01-08 02:34 am (UTC)Nunca me han gustado los fics en donde alguno es muy femenino, porque me da la impresión de que el otro quiere estar realmente con una mujer y no con un chico... Pero con éste fic no me sucedió eso a pesar de que Draco se "transformó" completamente en mujer… no te lo podría explicar pero nunca deje de pensar que era Draco... y eso fue… EXCELENTE!!!
no subject
Date: 2010-01-08 06:15 am (UTC)Creo que lo de que soportaras a Draco como casi mujer es porque... no sé... creo que lo supe llevar, y bueno simplemente me alegro de que te haya gustado, porque definitivamente disfruté escribiéndolo y soy feliz sabiendo que al resto también le gustó.
Besotes!!
no subject
Date: 2010-01-09 05:17 am (UTC)Nunca había leído nada tuyo. Es más, creo que nunca estuve por acá ^^
Pero me encantó!!! Me pereció genial.
Muy tierno, y dulce y super sexy. Toda la idea del vestido, y el último lemmon y a decir verdad, todo el fic en general fue como muy visual por decirlo de algún modo. Muy bonito.
Tu Draco es love!!!
no subject
Date: 2010-01-09 06:31 am (UTC)Me alegro de que te haya gustado! Tengo una predilección por hacer las cosas muy descriptivas y que todo lo que yo me imagino, quien lo lea sea capaz de imaginarselo tal cual yo lo veo. Muchas gracias por tus palabras :) Y sobre Draco... bueno, es mi personaje favorito ;)
Besotes!! y espero que te intereses en seguir leyendo :)
no subject
Date: 2010-01-11 02:01 am (UTC)Siempre que haya drarry, me va a interesar leer ^^